Se destiñe en silencio
al morir el otoño en mis manos,
cae como tinta todavía gélida
en la que aún viven historias
dulces, tristes, húmedas y muertas.
al morir el otoño en mis manos,
cae como tinta todavía gélida
en la que aún viven historias
dulces, tristes, húmedas y muertas.

ni las líneas tan cortas e insensatas,
hay algo, un dejo de realidad
ese abismo donde muere la ficción
y gana la siempre amarga razón.
Hasta el papel cambió su piel
apenas se encienden las palabras
casi no las escucho sonar al tocarse…
porque no hay aire que llenar con sinalefas
porque no hay tiempo para mentir.
apenas se encienden las palabras
casi no las escucho sonar al tocarse…
porque no hay aire que llenar con sinalefas
porque no hay tiempo para mentir.
Suena la luz en la ventana
no es la aurora ni Dios,
es ese despiadado carcelero…
el periodismo
asesinó a las mariposas.
no es la aurora ni Dios,
es ese despiadado carcelero…
el periodismo
asesinó a las mariposas.
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