jueves, 9 de enero de 2014

"Vivo... y muero"

Vivo
escondido en la última penumbra
que el día aún deja en su plato,
totalmente enterrado allí
evadiendo las cuestiones cercanas
aferrándome a la superficie
desde la costra de la mortalidad.

Vivo
anudado a un flujo solar
que solo sabe de batallas
que solo disfruta de canalladas,
vamos simbióticamente juntos
hasta donde la mentira nos deje,
morir encallados; vivir fluctuando.

Vivo
sonándole a la gente
cuando me nombran al reverso,
y solo sueno y no concuerdo ni encajo
porque temen al entendimiento
ese reconocimiento sarnoso
que sería causa de un latido mal mozo.

Vivo
inhalando sales ajenas
de esas que abandonan por tristes
marginadas porque fueron lágrimas
desentendidas por brotar amargas;
no hay lugar para el dolor
en sus vidas de un solo color.

Vivo
en el cerrojo de una puerta
que hace demasiado no cruje
ni al abrirse ni al cerrarse,
bienaventurados mis días sin llave
que me aprisionan a este agujero
donde solo entra mi propio deseo.

Lleno la última casilla,
firmo en la última línea
a centímetros de la cruz
y allí…
muero. 

No hay comentarios:

Publicar un comentario

¡gracias!